1. Canto inicial
03. HOY EN ORACIÓN
(La música del canto está al principio de esta página).
Disco 3, pista 7
Hoy en oración,
quiero preguntar, Señor,
Quiero escuchar tu voz,
tus palabras con tu amor.
Ser como eres Tú,
Servidor de los demás
¿Dime cómo, en qué luga
te hago falta más?
¿DIME SEÑOR EN QUÉ TE PUEDO SERVIR?
DÉJAME CONOCER TU VOLUNTAD
¿DIME SEÑOR EN TI YO QUIERO VIVIR?
QUIERO DE TI APRENDER, SABER AMAR.
Hoy quiero seguir,
tu camino junto al mar
Tus palabras, tu verdad,
ser imagen de Ti.
Ser como eres Tú,
servidor de los demás.
¿Díme cómo, en qué lugar
te hago falta más?
¿DIME SEÑOR EN QUÉ TE PUEDO SERVIR?
DÉJAME CONOCER TU VOLUNTAD
¿DIME SEÑOR EN TI YO QUIERO VIVIR?
QUIERO DE TI APRENDER, SABER AMAR.
2. Motivación
(papá o mamá)
Señor Padre Santo, nos encomendamos a tu gran amor y ofrecemos nuestra labor diaria para ir transformando nuestro mundo como levadura en medio de la masa y así logremos hacer presente tu reino de paz, de justicia y de amor, te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.
Amén.
Escuchemos el canto: Hoy en oración (Dime Señor), que aparece al principio de esta página.
3. Oración inicial
Oración Inicial.
(Papá o mamá)
+ En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
R.: Amén.
Señor, Padre de bondad, te pedimos que tu Santo Espíritu ayude a vivir la vocación de todos los miembros de la Iglesia, y especialmente el de nuestra familia, pues queremos estar conscientes que desde el momento de nuestro bautismo somos parte de tu gran Pueblo, en el cual cada uno debe cumplir una misión para construir un mundo más fraterno y solidario, te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
Todos: Amén.
4. Texto Bíblico
Escucha la Palabra de Dios de Hoy en audio al final de esta página.
Bendecido día para ti y toda tu familia. Te comparto la Palabra de Dios de Hoy: Viernes 17 de enero de 2025.
Estamos en la primera semana del tiempo ordinario.
Celebramos la memoria de San Antonio Abad.
Del santo Evangelio según san Marcos:
(Mc 2, 1-12.
Cuando Jesús volvió a Cafarnaúm, corrió la voz de que estaba en casa, y muy pronto se aglomeró tanta gente, que ya no había sitio frente a la puerta. Mientras él enseñaba su doctrina, le quisieron presentar a un paralítico, que iban cargando entre cuatro. Pero como no podían acercarse a Jesús por la cantidad de gente, quitaron parte del techo, encima de donde estaba Jesús, y por el agujero bajaron al enfermo en una camilla. Viendo Jesús la fe de aquellos hombres, le dijo al paralítico: “Hijo, tus pecados te quedan perdonados”. Algunos escribas que estaban allí sentados comenzaron a pensar: “¿Por qué habla éste así? Eso es una blasfemia. ¿Quién puede perdonar los pecados sino sólo Dios?”
Conociendo Jesús lo que estaban pensando, les dijo: “¿Por qué piensan así? ¿Qué es más fácil, decirle al paralítico:‘Tus pecados te son perdonados’ o decirle: ‘Levántate, recoge tu camilla y vete a tu casa?’ Pues para que sepan que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar los pecados – le dijo al paralítico –: Yo te lo mando: Levántate, recoge tu camilla y vete a tu casa”.
El hombre se levantó inmediatamente, recogió su camilla y salió de allí a la vista de todos, que se quedaron atónitos y daban gloria a Dios, diciendo: “¡Nunca habíamos visto cosa igual!”
Palabra del Señor.
Todos: Gloria a ti Señor Jesús.
(Papá o mamá)
Procuremos guardar un momento de silencio meditando la Palabra de Dios y contemplemos los signos que aparecen en la Cruz Vocacional mientras escuchamos una música instrumental.
5. Reflexión
(Hijo o hija)
REFLEXIÓN
De los laicos, dice el Catecismo de la Iglesia Católica que: ‘están incorporados a Cristo por el Bautismo, forman el Pueblo de Dios y participan a su manera de las funciones de Cristo, Sacerdote, Profeta y Rey’ (CIC 897). ‘Tienen como vocación propia el buscar el Reino de Dios ocupándose de las realidades temporales y ordenándolas según Dios’ (CIC 898). ‘Deben tener conciencia, cada vez más clara, no sólo de pertenecer a la Iglesia, sino de ser la Iglesia, es decir, la comunidad de los fieles sobre la tierra bajo la guía del jefe común, el Romano Pontífice y los obispos en comunión con él.’ (CIC 899). ‘Tienen la obligación y gozan del derecho... de trabajar para que el mensaje divino de la salvación sea conocido y recibido por todos.’ (CIC 900). Dice el Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica que los laicos debemos ofrecer a Dios ‘sobre todo en la Eucaristía, la propia vida con todas las obras, oraciones... la vida familiar y el trabajo diario, las molestias de la vida diaria sobrellevadas con paciencia, así como los descansos físicos y consuelos espirituales’ (ver CIC 188-191).
Queda así claro que los laicos se caracterizan por la secularidad. Este es el rasgo propio específico de su vocación. La secularidad es la afirmación del valor de las realidades temporales pero afirmando su dimensión trascendente y con la intención de ordenarlas desde principios espirituales y sobrenaturales. El secularismo es la afirmación de la realidad temporal que rechaza su dimensión trascendente, y, por tanto postula un “mundo” en el que no entra Dios, un mundo sin principios espirituales.
Los laicos son el signo de Dios que actúa, con toda su fuerza creadora, en medio de las realidades temporales. Cuando afírmanos la fe en Dios, creador del universo, estamos diciendo que todas las cosas se ordenan en él y tienen su sentido en él.
Ellos muestran a todos cómo el mensaje cristiano se concreta en la constante evolución de las estructuras sociales y políticas, en la expresión del arte y de la ciencia, en la educación y en tantos y tan variados campos de la secularidad.
Otra característica de la vocación laical es que su vida está como entretejida con esas realidades temporales, de modo que es inseparable de ellas. No es que los laicos, desde la Iglesia se introduzcan en el mundo.
Más bien hay que pensar en una Iglesia profundamente injertada en el mundo, y en los laicos como aquellos que expresan el sentido cristiano de todas las cosas a partir de su misma vida.
COMPARTIR LA REFLEXIÓN.
Ver los videos para saber tu lugar en el mundo:
QV 07 - Desde la Profesión (https://youtu.be/_VAIFLefCM8) Duración 3 minuto 1 segundos.
Este video también aparecen en la Memoria USB que acompaña la Cruz Vocacional.
6. Compartir la reflexión
(Papá o mamá)
Si alguien quiere compartir algo de lo se que meditó sobre la Palabra de Dios o sobre la reflexión que acabamos de escuchar ahora es el momento para compartir.
(Procurar no extenderse mucho ni polemizar en la reflexión y procurar que todos participen).
7. Peticiones
(Papá o mamá)
Acudamos a Dios Padre, que en Jesucristo nos ha llamado a ser un Pueblo Santo, presentándole nuestra oración comunitaria. Respondemos todos:
Escúchanos Padre.
(cada uno hace alguna petición)
1. Por toda la Iglesia universal, para que guiada por el Espíritu Santo, pueda siempre responder al llamado constante hacia la santidad. Oremos. Oremos.
2. Por todos los laicos comprometidos, hombres y mujeres, que han sabido testificar cómo la fe cristiana es la única respuesta plenamente válida a los problemas y expectativas de la vida, haciendo presente a Cristo y al Evangelio, siendo luz y fermento, y haciendo que todas las cosas estén en orden al Reino de Dios. Oremos.
3. Por todos los cristianos, para que las preocupaciones y problemas de la vida no los aparten de Dios. Oremos.
4. Para que seamos capaces de ver y tener conciencia de los que están lejos de Cristo en medio de nosotros y así ayudarles con nuestro testimonio a conocerte más Señor. Oremos.
5. Para que todos los que se preparan al matrimonio tengan conciencia de las exigencias de la fidelidad y del amor, y así puedan dar una respuesta firme al llamado de Dios. Oremos.
(Se pueden añadir algunas intenciones).
(Papá o mamá)
Todas estas intenciones te las presentamos Padre que nos amas tanto y que con tu Santo Espíritu nos invitas a seguirte, porque queremos comprometernos a dar testimonio de Ti en medio del mundo. por tu Hijo Jesucristo nuestro Señor. Amén.
Fieles a la recomendación del Señor y siguiendo su divina enseñanza, nos atrevemos a decir:
Padre Nuestro...
Nos dirigimos a María, madre de Jesús y madre nuestra diciendo:
Dios te salve María...
8. Oración Vocacional
(Hijo o hija)
Oración por las Vocaciones. (se puede ver el vídeo en la siguiente liga: https://youtu.be/F6v_c0xa81M)
Señor Jesús:
Te pedimos que envíes a tu pueblo
los servidores que necesitan.
Escoge de nuestras parroquias.
De nuestros hogares.
De nuestras escuelas.
Y universidades.
Una abundante cosecha
de ardientes apóstoles
para tu reino.
Sacerdotes,
Religiosos,
Religiosas.
Misioneros,
y apóstoles laicos.
Y haz que los llamados por TI
Nunca pierdan conciencia de la grandeza
y necesidad de su vocación.
¡Oh Virgen María, Madre de la Iglesia!
Enseñanos a decir a todos los llamados por el Señor.
Un Sí con alegría.
Como el que tú dijiste.
Amén.
Todos hacen esta oración breve como indica al pie de la Cruz Vocacional:
Señor, que nuestra familia
sea fuente de vocaciones (3).
9. Canto final
2. Aquí estoy
(La música del canto está casí al final de esta página).
(CD 1, Pista No. 2)
Hoy en el silencio de mi ser, quisiera hablarte Señor
de mi inquietud por serte fiel. Hoy estoy de nuevo junto a ti, deseo entregarte mi ser
con tu amor, conságrame.
Y aquí estoy mi Señor
con mis ganas de servir toma de mí lo que quieras, lo puedes repartir.
Y aquí estoy mírame
con mis ganas de vivir tómame y llévame,
donde más necesiten de mí.
Hace algún tiempo te conocí y me enamoré de ti,
desde entonces te seguí. Hoy te amo cada día más,
el no tenerte me hace mal. Eres mi fuerza para andar.
Y aquí estoy mi Señor
con mis ganas de servir, toma de mí lo que quieras, lo puedes repartir.
Y aquí estoy mírame
con mis ganas de vivir, tómame y llévame,
donde más necesiten de mí.
Donde más necesiten de Ti.
La Palabra de Dios de Hoy viernes 17 de enero de 2025.
Canto Final